¿Quién es Capi? os preguntaréis algunos, Capi era mi tío, yo perdí a mi padre a la edad de 13 años, él pertenecía a una familia numerosa, eran 10 hermanos (hoy tan solo quedan 2). Mi padre fue el segundo de los hermanos en dejar este mundo y cuando eso sucedió, su hermano Capi fue quién más se volcó con nosotros y más nos ayudó.
Capi para mi fue como un padre, con él descubrí entre otras cosas, la delicia de leer, aunque en el colegio e instituto nos enseñaran a leer y nos mandaran mil libros, no fue hasta que Capi me regaló el libro El perfume y me dijo: "cada libro es una aventura, leer te hace viajar, ojalá lo disfrutes mucho", que empecé a gozar de la lectura. Cuanta razón tenía, no solo me entusiasmó ese libro de Süskind, si no que comencé a devorar libros como si no hubiera mañana, leer es de lo más maravilloso de este mundo.
También me enseñó la de miles de formas que hay de ver la vida, a disfrutar de la naturaleza, simplemente estando en ella contemplando (jamás podré decidirme entre playa o montaña, ambas son necesarias para mi, y me duele ver lo mal que la tratamos), él me descubrió a Enya, Crowed House, UB40... me enseñó que lo importante del mundo era amar, y que eso se estaba perdiendo, cuanta razón tenía. Me alentó en varias ocasiones a escribir, el decía: tendrías que ser escritora, observas demasiado y eres muy madura para tu edad, escribe! y... si no tengo más tropezones con el tiempo, y me da un respiro pronto, lo más seguro es que el año que viene o máximo el otro, cumpla sus palabras y salga a la luz mi primer libro.
Capi era un SER ESPECIAL, luego ya se puede decir que era un artista, un creativo, un pintor, escultor, aventurero, un amigo de sus amigos, un amante de la naturaleza, disfrutón, gracioso, leal, trabajador, soñador, el que pintaba hormigas... pero ante todo, él era la definición de AMOR.
Jamás le he visto albergar maldad, ni hablar mal de nadie, y motivos tenia. Capi se ganaba la vida como artista, como farero de Columbretes, como guarda forestal en el Bartolo de Benicassim y como dueño del Plàstic junto con su "hermano de alma" Rafael Pallarés. Hay que ver que compleja es la vida, dos amigos que se hermanan, dos amigos que son uno, y ambos fallecen el mismo mes y de lo mismo aunque en diferentes años, caprichos del destino.
Hoy ambos están juntos en el lugar donde van los que dejan la tierra.
(Si algo sé es que somos energía y la energía no se destruye, se transforma. Por lo tanto al morir no morimos, dejamos nuestro cuerpo y nuestra energía se transforma. Puedo estar loca, no pasa nada, ya me lo enseñó Capi, los demás te verán como loca por no pensar como ellos, pero yo soy feliz así, pensando que eso es lo que nos pasa cuando nos toca dejar esta vida).
En definitiva, me siento muy afortunada por haber crecido en la familia que me ha tocado, de haber tenido a Capi como tío y mejor aún, haberle podido disfrutar tanto, aunque fuera tan efímero todo.
Te quiero CAPITÁN y a día de hoy aún te echo en falta.
Que paséis una buena semana!
Besos y sonrisas :* :D
B.